Anterior al gramófono y al tocadiscos, este aparato utilizado para grabar y reproducir música fue inventado por Thomas Alva Edison en 1878.
El
consumo de música de manera creciente pasó del mero entretenimiento
planificado a la omnipresencia. Ya no el fonógrafo sino los
reproductores de música están instalados a través de diversos
dispositivos. El fonógrafo fue uno de los tantos inventos de Thomas Alva
Edison. No fue el primero ni el único, pero fue quien lo bautizó y
despertó la curiosidad de otros que lo perfeccionaron pero que mantuvo
el nombre original dado por Edison en 1878. Hoy en día se pueden
apreciar distintos modelos de fonógrafo en museos de todo el mundo.
El
inventor buscaba un sistema que permitiera registrar la voz humana y
acelerar los dictados en las oficinas. En el proceso de pruebas, en
1877, grabó la canción infantil “Mary had a little lamb” y se sorprendió
con las posibilidades del aparato que registró en 1878 como fonógrafo.
La palabra “fonógrafo” proviene de los vocablos griegos fono (sonido,
voz) y grafo (escribir). El impacto del nue- vo aparato se reveló en
1889. Theo Wangeman, de la casa Edison, grabó a la soprano Effie Stewart
en la Cate- dral de San Patricio. La interpretación de “West Orange” es
uno de los prime- ros intentos por grabar música.
El
famoso invento empezó a reco- rrer el mundo como tocadiscos, a par- tir
de un nuevo invento: el disco. El fonógrafo de Edison grababa sonidos
en una hoja de papel de aluminio en- vuelta alrededor de un cilindro
gira- torio. Un lápiz táctil que respondía a las vibraciones del sonido
producía un surco hacia arriba y hacia abajo en la lámina. Dos años
después, el la- boratorio de Alexander Graham Bell introdujo el
grafofón, cuyo lápiz se movía de un lado a otro en un surco en zigzag,
lo que dio origen a la púa.
En 1890, Emile
Berliner introdujo los discos planos, la plataforma gira- toria, el
lápiz o aguja y sistemas de so- nido y ecualización. Lo llamó gramófono,
un gran salto de calidad pues los cilindros del fonógrafo se hacían de a
uno por vez. Es decir, una canción debía ser ejecutada tantas veces co-
mo cilindros se fabricaran. En cam bio, el disco permitió las copias.
El
gramófono desplazó rápidamente al fonógrafo. El disco plano de
vulcanita o ebonita fue la gran innovación: permitió bajar los costos y
la reproducción en serie. Berliner creó la compañía Victor Talking
Machine en 1901 y el aparato se popularizó como victrola. En 1929, la
empresa pasó a manos de RCA, que le agregó el nombre “Victor”, ya que el
inventor mantuvo parte de sus acciones.
Ese
primer formato de discos de gramófono giraban a una velocidad uniforme
de 78 revoluciones por minuto (78 RPM). Los discos de pasta, negros,
rígidos y frágiles, son de goma laca endurecida. Se vendían en sobres de
papel y tenían en su centro un círculo recortado donde se indicaba el
contenido del disco. Los primeros ejemplares solo contenían grabaciones
en una de sus caras.
El impacto de estos
discos se mantuvo hasta los años 20, cuando fue reemplazado por el disco
de vinilo, más liviano y flexible. En los años 30, Berliner decidió
ocultar la bocina en una caja, principal características del fonógrafo.
Nacieron nuevos tipos de muebles de tocadiscos, como los populares
combinados.
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